Precioso haiku...a pesar de los tambores, llega la primavera.Saludos australes!
Este haiku también tiene su "duende"; la correspondencia entre el sonido de los tambores pascuales y esa bien administrada hipérbole de los geranios primaverales, dan al conjunto su intensidad y..., vuelvo a decirlo: su "pellizco". Saludo intermediterráneo,JL
Precioso haiku...a pesar de los tambores, llega la primavera.
ResponderEliminarSaludos australes!
Este haiku también tiene su "duende"; la correspondencia entre el sonido de los tambores pascuales y esa bien administrada hipérbole de los geranios primaverales, dan al conjunto su intensidad y..., vuelvo a decirlo: su "pellizco".
ResponderEliminarSaludo intermediterráneo,
JL